El Real Zaragoza, en su vuelta a La Romareda, no supo defender su ventaja ante el C.D. Lugo.
Por parte del Real Zaragoza se alinearon: Irureta, Zapater, Marcelo Silva, Valentín, Cabrera, Morán, Javi Ros, Edu García, Xumetra, Cani y Angel.
Por parte del C.D. Lugo se alinearon: José Juán, Calavera, Djaló, Miquel, Leuko, Sergio Gil, Seoane, Pedraza, Campillo, Iriome y Joselu.
Arbitró el "Mozart" del árbitraje, el señor De La Fuente Ramos, Comité Castellano-Leonés.
La cosa ya empezó torcida, pues horas antes del encuentro tuvo lugar una concentración de los colectivos de animación del Real Zaragoza, que no de las Peñas, éstas siempre del lado de la directiva, volvemos pues a los tiempos del nefasto Agapito Iglesias y sus almuerzos ( mondongadas) de pretemporada.
Con los aficionados muy calentitos y no precisamente por la temperatura empezó el partido con una clarísima ocasión malograda por Angel, aunque José Juán estuvo muy acertado, sacando una mano a ras del cesped que evitó el primer gol zaragocista.
Los gallegos pudieron adelantarse poco después si no se hubiera anulado el gol a Joselu, el juez de linea levantó el banderín, aunque en mi opinión, era un tanto dudoso el tal fuera de juego.
Campillo lo intentó desde muy lejos y el balón salió por encima del larguero. El equipo aragonés centraba balones al área lucense, pero de forma ineficaz, pues Angel no tiene altura para pelear con los centrales rivales, ni del Lugo; ni de ningún otro equipo, no es ese su juego.
A todo ésto, Lanzarote no fue ni convocado, uno de los pocos jugadores que saben centrar bien, sus rencillas con Agné seguían latentes tras el partido contra el Girona.
La segunda parte no pudo empezar mejor para el equipo local, tras un error de Miquel, Javi Ros robó el balón y sirvió en bandeja para que Cani materializara el primer y a la postre, único tanto zaragocista. Minuto 59 de partido.
Pero el gozo en un pozo, pues los de Luis César siguieron creyendo en sus posibilidades y sacó a Caballero sustituyendo a Pedraza. Irureta atrapó un tiro de Joselu sobre la linea y ya en los minutos de descuento, se añadieron 3, el Lugo en el minuto 91 consiguió un merecido empate.
Merecido porque el Zaragoza renunció al balón, merecido porque lucharon y creyeron en sus posibilidades hasta el final y, al igual que ocurriera en el partido de la primera vuelta, el Zaragoza se dejó comer el turrón y no supo competir.
La jugada del gol de Fede Vico vino tras una pérdida en el centro de campo, jamás se puede permitir que un jugador pase a un compañero sin que el rival le haga falta, y más en los "minutos de la basura", por otra parte siempre el balón para el que va de cara, en este caso Marcelo Silva, que hubiera despejado sin más problemas, pero.....el balón llegó a Fede Vico, quien con un disparo lejano batió a Irureta, que pudo hacer, todo hay que decirlo, algo más.
Destacar varias cosas en el cuadro maño, en el minuto 32 se produjo la tradicional pitada a la directiva, aunque ésta la sufriera por primera vez. Con una afición muy desencantada con la trayectoria del equipo tampoco fue como en otras ocasiones, muy moderada, algunos pañuelos de protesta en las gradas y Cuartero y Juliá tranquilitos en el palco, al igual que el presidente Lapetra.
En el terreno de juego, Zapater actuó de lateral derecho; siendo Cabrera el izquierdo, colocando en el centro de la zaga a Marcelo Silva y Jesús Valentín.
En el centro de campo salió de titular Erick Morán, hoy ya jugador del Leganés. Morán que no había contado sino con los minutos finales ante el Tete y el UCAM, tuvo ocasión de mostrar su calidad, aunque con poco empuje (rasmia, como decimos aquí). Debutó Edu Bedia sustituyendo a Cani, muy cansado, el del barrio zaragozano de Torrero dió todo lo que pudo y marcó el gol maño. Bedia con alguna floritura, que no venía al caso, pues el partido estaba como estaba.... demostró "gotitas " de su calidad, pero por ahora no deja de ser una incógnita.
En el ataque, Xumetra, que no se va de nadie, luchó hasta donde pudo, su fondo físico escaso, lo sustituyó Xiscu, calentó Dongou, pero al final no salió.
Volvía a La Romareda el canterano zaragocista Sergio Gil, luchó mucho, dió cera, y tuvo un enfrentamiento con Angel tras un plantillazo al de La Laguna, por consiguiente tarjeta amarilla para el chicharrero, al que le dan todas partido tras partido, las de él y las de los demás.
Semana movida pues la que se espera por la ciudad del Pilar.
Sergio Gil, que al igual que otros canteranos como Victor Laguardia, hoy en el Alavés, aquí no valen y en otros equipos son titulares indiscutibles, pero ésto lo analizaré en los próximos días tras el cierre del mercado invernal de fichajes.
Artículo hecho por Rafael Segura.
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