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jueves, 29 de diciembre de 2016

BETIS, VÍSTETE DESPACIO QUE LLEVAS PRISAS

Hablar de estabilidad en el Betis los últimos años viene siendo como hablar de las películas de James Cameron, ciencia ficción en sus 360º.

Seguimos viendo las mismas taras año tras año, a nivel directivo y a nivel competitivo. Cuesta creer que con tanta renovación de plantilla y tanto cambio de entrenador los fallos residan en el mismo sitio: Cuando no es la defensa floja, es el centro pasivo, que son los laterales tan amplios como praderas.

Si no ocurre en el césped, ocurre en el banquillo, las maneras a la hora de resolver o preparar partidos sigue dejando que desear. El aficionado se ha visto en la situación muchas, demasiadas veces, en la situación de comprender una convocatoria, una táctica o unos cambios. Esto se repite y estamos hartos de verlo, impotentes, cada jornada.
¿Nuestra solución? está arriba. En la planta noble. Sobre los dirigentes. O debería estarlo.

No hay un pilar en el que apoyarse tras 10 años, porque el bético también se cansa de aferrarse solo a un escudo, a un color, necesita un nombre, un líder, una mano que sostenga este barco y que se sepa que lo seguirá sosteniendo cuando comience a hundirse. Necesita alguien que haga un club grande para una afición aún mayor, que nos guie de nuevo al estrellato y nos mantenga allí, que de el golpe en la mesa cuando se ríen y faltan el respeto a un club hazañoso públicamente, desde periodistas hasta presidentes que lejos de cumplir su función, ridiculiza cuando puede a uno de sus nombres más históricos.

Para eso está el 30-D. ¿El problema? No hay total confianza, la afición aún no ve clara en Haro y Catalán la condición deseada para que sigan sosteniendo el bastón de mando, esto se agrava cuando las alternativas que hay hacen santos a los de "Ahora, Betis, ahora", personalmente, no estoy dispuesta a volcarme ciegamente en ellos, tras tantos escarmientos, es mejor andar con cautela, pero de de ahí a querer volver a apoyar a los que iniciaran la catástrofe... Me parece ilógico e irresponsable. Por el bien del Betis.

Nos conocemos estas críticas demasiado bien, las tenemos a la orden de cada partido y de cada noticia, pero ¿sabemos realmente mirar al otro lado? ¿Sacar y sobre todo reconocer las cosas positivas? No todo ha sido malo, de hecho, de mano de HyC se han conseguido cosas que tan solo hace uno o dos años no nos pensábamos que podríamos tener: Televisión, que aunque un poco obsoleta, va cogiendo calor poco a poco; volvemos por fin a disfrutar de emisora de radio; Betis Energía Plus, cosa impensable; y lo más ansiado, remodelación del viejo Gol Sur, de aquí a pocos meses el Villamarín se verá casi casi completo, con una grada que avanza a buen ritmo y que ya va cogiendo forma; y no Gol Sur cambia de cara, esta temporada ya hemos disfrutado de nuevos banquillos y no hace mucho el club publicó en su cuenta oficial de Twitter otra serie de remodelaciones internas en el túnel de acceso al campo y sus pasillos adyacentes.







En el plano de juego, hemos tenido de nuevo cambio de entrenador (y van...), tras la mala racha con Poyet que dejó de ser permisible en cuanto se le sumó la actitud derrotista y conformista, llegó Víctor Sánchez del Amo, que a pesar de darle un aire nuevo al equipo con su llegada y una seriedad que a priori gusta, volvemos a lo de siempre, tras ver cambios buenos con los que uno puede llegar a pensar positivamente, llega la bofetada de realidad y, de nuevo, un equipo al que se le olvida jugar de una jornada a otra, y que aún no sabe como mantenerse en Copa. No es muy destacable el curso competitivo de este 2016, hay que luchar mucho para cambiar las expectativas lo que queda de liga el próximo 2017. Dejar de mirar asustados para abajo y comenzar a mirar decididos hacia arriba.

No tenemos ni de lejos el Betis que queremos, pero si está un paso más cerca del que merecemos, no es la mejor directiva, pero es la que ha conseguido subir ese par de escalones que se debieron subir hace mucho y que esperamos que no dejen de intentar y trabajar por seguir subiendo, para que consigamos decirnos, a un medio-largo plazo, "ahí está, en lo más alto, otra vez, nuestro Betis" .

Artículo hecho por Ana Gutiérrez (@anita_bando)

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