EMPIEZA LA RECONQUISTA
Game over para el Granada. Se agotaron las vidas. Muchas de ellas se usaron a lo largo de 6 temporadas en Primera División, con permanencias agónicas pero que al final se lograban. Esta vez era prácticamente imposible. Ni meigas, ni dioses, ni san Leopoldo pudieron salvar al equipo nazarí del descenso a la Segunda División. Hoy el equipo tenía una oportunidad para intentar al menos quedar penúltimo (a expensas de lo que hiciera Osasuna contra el Sevilla) pero ni con esas. Derrota muy merecida ante un Espanyol que tampoco jugó a nada, pero que a poco que hizo al inicio del encuentro (con la inestimable ayuda de la defensa granadina) se llevó una victoria que le permite ascender momentáneamente a la octava posición.
El encuentro comenzó de una manera terrorífica para el Granada. Ni en las peores películas la afición de Los Cármenes se temía lo que iba a pasar. Sólo habían transcurrido dos minutos cuando un horrendo despeje de Lombán (se negocia su renovación...sin comentarios) dejaba el balón a Baptistao para que remachara a la red de Ochoa. El remate final llegó poco después cuando Vezo al intentar despejar un centro de los pericos, metió gol en su propia portería. 7 minutos 2 goles en contra. Un nuevo récord (negativo) para este Granada especializado en destruir las esperanzas de la afición nazarí.
Solo hubo un jugador en el Granada que intentó tirar del carro y ese fue Andreas Pereira. Llevaba la iniciativa de su equipo, intentando la guerra por su cuenta en la mayor parte de las ocasiones y obtuvo su premio. En el minuto 21 Andreas se posicionó para realizar un disparo con rosca perfecto que además obtuvo la inestimable "ayuda" de Diego López al tragarse el tiro. El Granada lograba por fin entonarse. Sin embargo esto solo fue un espejismo más. El conjunto nazarí llevaba las riendas del partido pero no lograba hacer daño a un Espanyol muy tranquilo. Sin más novedades se llegó al descanso. Posteriormente el segundo tiempo fue tan soporífero que ninguno de los dos tuvieron ocasiones claras. Tan solo un remate al palo de Diego Reyes (tras disparo de Piatti) anulado por fuera de juego. Esta parte del encuentro sirvió para homenajear a Pereira (cambio inexplicable en el minuto 59 por Jean Carlos, demasiado pronto si se quería intentar conseguir el empate) y al canterano Entrena (futuro del equipo en Segunda División). El final del partido transcurrió entre pitos, indiferencia, aviones de papel y poco más.
Por fin acabó la temporada para el Granada. Una vergüenza de curso perpetrada por una plantilla que no ha conocido nada más que el ridículo tras ridículo, una y otra jornada. Un despropósito que ya comenzó en verano con una planificación caótica, varios entrenadores, demasiados cedidos etc. Toca pensar en la Segunda División y gracias a dios, con un nuevo equipo. Decir adiós a esta lamentable plantilla que, salvo casos excepcionales como Ochoa o los canteranos, no merece ni siquiera la atención más mínima por parte del aficionado granadino. Ahora toca centrarse en la próxima temporada. Un equipo nuevo y una esperanza asoma por el horizonte. El Granada no intentará subir a Primera. Debe volver a subir. Volveremos. Empieza la reconquista.
Granada C.F: Ochoa, Héctor, Lombán, Ingason, Vezo, Krhin,Uche (77´Hongla), Entrena (84´Boga), Andreas Pereira (59´ Jean Carlos), Cuenca y Adrián Ramos.
R.C.D. Espanyol: Diego López, Aaron, Diego Reyes, David López, Marc Navarro, Víctor Sánchez, Marc Roca, Piatti (84´Víctor Álvarez), Jurado, Leo Baptistao (85´Hernán Pérez) y Gerard Moreno.
Artículo hecho por Manuel de la Iglesia (@MrManu_8 )
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