El Cádiz ha finalizado su temporada en la Liga 1/2/3 de forma existosa aunque con un sabor agridulce, incluso algunos aficionados decepcionados, pero si hacemos memoria y repasamos toda la temporada del conjunto amarillo y sobretodo el cómo llegó a la segunda categoría nacional, sale a la luz un resultado indiscutible: La temporada del Cádiz CF ha sido sobresaliente.
El retorno a la división de plata:
Finalizaba la fase regular en el grupo 4 de Segunda División B, y el Cádiz quedaba cuarto, por detrás de UCAM Murcia, Real Murcia y Sevilla Atlético, y las cosas parecían muy difíciles, ya que nunca un equipo había ascendido quedando 4o en la liga regular. En el playoff se enfrentó al Racing de Ferrol, al Racing de Santander y en la última eliminatoria al Hércules. El primer partido de esta eliminatoria fue en el Carranza, acabó el partido 1-0 para los cadistas, con gol de Carlos Calvo. El primer paso estaba dado, pero quedaba el viaje a Alicante, y la afición, que no dejó de creer nunca en los suyos, se desplazó en masa hasta el Rico Pérez, y allí fue Dani Güiza quien marcara el gol que sentenciaba la eliminatoria 0-1 y a Segunda.
6 años después en Segunda, primeros pasos:
El cadismo y en general toda la ciudad de Cádiz celebraba el ansiado ascenso. Y llegó el momento de demostrar de qué era capaz aquel equipo en la Segunda División española, el Cádiz tenía un objetivo muy claro, la permanencia. Y las cosas no comenzaron bien, ya que no fue hasta la jornada 5 cuando el conjunto de Cervera consiguió su primera victoria en su vuelta a Segunda, eso sí, contra todo un Getafe, equipo que ya es de 1a. Pero las cosas seguían algo torcidas, tonteando con el descenso, el único que se salvaba era Ortuño, ya que el murciano daba goles al Cádiz pero no le servían al equipo para ganar.
El Lugo, punto de inflexión:
Con un gol de Álvaro García el Cádiz lograba en Lugo su primera victoria fuera de casa, y esta victoria fue un punto de inflexión, el equipo pasar de coquetear con el descenso a meterse en los playoffs, Cervera llegó a ser cuestionado para acabar siendo alabado por toda la afición cadista. Y es que después de este partido el Cádiz gano 7 partidos de 9 jugados, una regularidad muy buena en segunda, y que te lanza para arriba de forma rapidísima. Por este entonces el equipo seguía teniendo nombre y apellido: ALFREDO ORTUÑO.
A pesar de esta racha y otra de cuarto partidos ganados consecutivamente, en el entorno cadista se seguía hablando de los 50 puntos necesarios para la ansiada permanencia en la Segunda División.
El asalto a Montilivi, objetivo logrado:
A mitad del mes de marzo el Cádiz viajaba a Girona, con una curiosa coincidencia, el Carnaval de Cádiz a la misma hora del partido, tomaba por primera vez el Liceo de Barcelona. Coincidencia y dolor de cabeza para gaditanos afincados en Cataluña que tenían que debatirse entre un evento único como era disfrutar del Carnaval en una plaza como el Liceo, o la posibilidad de ver al Cádiz de sus amores conseguir la permanencia en un campo tan difícil. Mucha gente fue a Montilivi pero, puedo asegurar ya que estaba presente, que muchos cadistas se decantaron por el Carnaval, quizás porque las entradas se pusieron a la venta en navidad y no creían que el Cádiz estuviera tan cerca del objetivo por aquel entonces. Volviendo a lo importante, Montilivi era un fortín infranqueable, el Girona no había sido derrotado en su campo en toda la temporada, y el Cádiz necesitaba la victoria ese día para lograr la permanencia y disfrutar lo que quedaba de Liga, aunque toda la entidad y su entorno sabía que la gesta era muy difícil. Nada más lejos de la realidad, 15 minutos le bastaron a Ortuño (quién sino) para penetrar la portería gerundense, y 5 minutos después sería Álvaro García quien pusiera al Cádiz con dos goles de ventaja. En la segunda parte el Girona solo pudo maquillar el resultado con un gol de Longo. De esta manera el Cádiz sellaba la permanencia, en Marzo, con muchos partidos por delante.
De la ilusión al sueño:
Con el objetivo cumplido al cadismo y a la plantilla del Cádiz solo le hacía falta una cosa, disfrutar, sin ningún otro objetivo, y esto es peligroso, y el Cádiz perdió contra el Tenerife, acto seguido el conjunto amarillo tuvo una racha rara de 10 partidos sin perder, pero 8 de ellos con empate, y esta racha seguía siendo mas rara porque coincidió con unos partidos de sequía para el goleador Ortuño. El cadismo seguía incrédulo, el entrenador que los había ascendido, que había dejado cuartos en SegundaB, que había coqueteado con el descenso en segunda y el equipo confeccionado para la permanencia estaba en pura lucha por entrar en los playoffs de ascenso, y el cadismo lo veía cada vez mas cerca, como un sueño que poco a poco se hacía realidad, y se acabó por realizar en la penúltima jornada, en el Carranza, mejor plaza imposible. Contra un Elche que esperaba ganar los dos partidos que le restaban y alguna carambola que le asegurara la permanencia, pero el primer requisito no lo cumplió y es que el Cádiz fue muy superior a un conjunto ilicitano que selló su descenso en la Tacita de Plata, con muchísima afición desplazada y con la magnifica afición cadista animando a jugadores y afición rival después de este duro trago.
Del sueño a la dura realidad:
El conjunto del Submarino Amarillo, acabó 5o en la Liga regular, puesto muy determinante de cara a los playoffs. En la primera eliminatoria tendría que enfrentarse al Tenerife. El primer partido en el Carranza fue un monólogo del Cadiz, pero que no supo aprovechar, pudiendo sentenciar la eliminatoria en un partido en casa, los tinerfeño solo se fueron con un gol encajado a las islas. Y el partido de vuelta el Cádiz salió "acarajotao" ( como dicen los gaditanos), y el Tenerife igualó la eliminatoria. En la segunda parte el Cádiz volvió a ser muy superior al equipo chicharrero, pero la suerte no estuvo de su parte. Tras el 1-0 final, quedaba la prorroga, al no marcar ninguno de los dos equipos, el Tenerife pasó a la siguiente ronda por haber quedado una posición por encima del Cádiz.
Para resumir la temporada se podrían utilizar muchos términos, y podríamos destacar muchas cosas, pero siendo escueto, directo y preciso creo que las palabras que mejor definen la temporada del Cádiz son: Ilusión y orgullo
Articulo hecho por Ivan Galvan (@ivanbetisbarna)
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