El hondureño se ha convertido en un jugador indispensable
para este Tenerife. Ya lo era con Raúl Agné, en cuya etapa el Choco se
convirtió en el salvador del equipo con sus goles manteniendo la esperanza del
aficionado blanquiazul para al menos permanecer una temporada más en la Liga
Adelante. Ahora, con la llegada de Martí, el equipo tiene más empaque y sabe a
lo que juega y de ello se ha beneficiado Lozano.
Todos conocemos las cualidades de este jugador. Potente,
gran juego de espalda, buen disparo a puerta y capacidad de desmarque. Cuando él
está en el verde se palpa el gol.
Sin embargo, con el paso de las jornadas han ido surgiendo
bastantes dudas sobre su estado físico. Desde esa convocatoria con su selección
ha venido arrastrando problemas musculares que aún no han terminado de sanar. El jugador
ha estado mermado y rara vez ha podido aguantar los 90 minutos del encuentro.
Es cierto que esa lesión que padece viene de antes de dicha convocatoria, pero
tras ir con su combinado nacional regresó en un estado aún peor (y eso que no
jugó). Lo preocupante del asunto es que aún hoy, finales de enero, el jugador no
termina por recuperarse del todo para poder así afrontar con plenas garantías
los partidos del representativo blanquiazul.
Recordemos que la lesión se produjo en el mes de octubre del
pasado año, cuando concretamente se dijo que tenía unas “pequeñas molestias en
el pubis”. El 10 de diciembre el propio jugador argumentaba que “la lesión ya
está olvidada”, pero lo cierto es que no se le ha vuelto a ver al 100%.
Con todo ello, a pesar de las constantes y repetidas
ausencias del jugador, ya sea por convocatoria de su selección o por la dichosa
lesión, es el máximo artillero del conjunto blanquiazul.
Ahora bien, se plantea una duda de suma importancia en el
horizonte:
¿Conviene hacerse en propiedad con un jugador cuyo estado
físico está generando tantas dudas?
Recordemos que el jugador está a préstamo durante una
temporada y que el precio para hacerse con el jugador en propiedad rondaría el
millón de euros, cantidad que, a día de hoy, parece prohibitiva para la entidad
que preside D. Miguel Concepción.
En humilde opinión de un servidor, la apuesta es arriesgada,
pero quien no apuesta no gana. Al Choco se le presupone un gran futuro en el
fútbol y si el Tenerife actúa con inteligencia tenemos delantero para rato y un
día, quién sabe, poder venderlo y sanear las maltrechas arcas blanquiazules.
Yo apuesto por el Choco Lozano
Artículo hecho por Adal
Quintero.
No hay comentarios:
Publicar un comentario