![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhigtpNNNKHsCtCq9by9v-kaDo9VXFAP9z1JWclUHEsju1sEnGwfovU90uyz1_58bYS8KtAIEdxdYQ6zM07vQh4gPWtuaks__s5qZyZbhBRxQru1p4MI7tfnDwaHWrUuD3iy1loK7v6Siw/s280/football-soccer-real-sociedad-v-barcelona-spanish-liga-santander-anoeta-san-sebastian-spain-27-11-2016-real-sociedad-celebrate-a-goal-reuters-vincent-west.jpg)
Increíble partido el vivido anoche en Anoeta entre el equipo local y el Barcelona, aunque parecía que tenían los papeles cambiados. La Real Sociedad proponía juego, tocaba el balón y creaba ocasiones de gol. El Barça sólo se defendía y dependía mucho de la suerte, tras 17 disparos a puerta de los Donostiarras. Incapaces de enlazar 5 pases seguidos, con un centro del campo con Busquets, Rakitic y André Gomes, donde los 3 estuvieron penosos, sin conseguir mantener la posesión ni conectar con el tridente, que eran tres islas en un desierto.
Eusebio le dio un baño táctico a Luis Enrique y sus hombres les pasaron la mano por la cara a los culés, que aún se salvaron barato, teniendo en cuenta que no dispararon a puerta hasta el minuto 41 de partido, con un tiro de Luis Suárez que salió muy desviado.
Con Neymar errático y Messi desaparecido, el uruguayo corría y corría como un pollo sin cabeza.
En esta primera mitad, Jordi Alba y Piqué dieron el susto con sendos golpes, confundidos con lesiones ya que enseguida pidieron el cambio los dos. De todas formas, todo fue una falsa alarma y finalmente pudieron seguir en una defensa culé ya de por sí, muy mermada por las lesiones.
Hasta que en el minuto 53, la Real abrió el marcador tras una jugada de Carlos Vela, que despeja Ter Stegen y William José recoge el rechace y, aunque no iba a portería, Piqué, aún renqueante de su golpe en el tobillo, se introduce el balón en su propia portería y hace justicia en el marcador. De todas formas, sólo 6 minutos después, Neymar recoge un balón en la izquierda y tras una gran cabalgada sorteando diversos rivales, cede el balón a Messi dentro del área y éste fusila a Rulli para volver a poner las tablas en el marcador.
Sin reacción en el banquillo tampoco, con un Luis Enrique impasible al ver el desastre que estaban protagonizando sus hombres, no buscó soluciones y sólo hizo un cambio, tras más de 100 millones gastados en fichajes éste verano.
Artículo hecho por Meri (@Mtenas)
No hay comentarios:
Publicar un comentario