GERARD MORENO RESCATA UN PUNTO DE BALAÍDOS
El Celta y el Espanyol empataron ayer en un partido en el que el Espanyol se adelantó pero los locales remontaron y tuvo que empatar Gerard Moreno a menos de 5 minutos del final. Se pudo ver la diferencia futbolística de estos dos conjuntos, uno de ellos, los locales apostaron por su fútbol vistoso y combinativo al que nos tienen acostumbrados, por su parte los catalanes jugaron más a esperar y salir a la contra, que también es su forma habitual de plantear los partidos, y más exageradamente aún cuando los partidos son lejos de "CornePrat".
Se enfrentaban ayer 2 equipos que al principio de temporada tenían un mismo objetivo, Europa. Pero a estas alturas de las temporadas solo los gallegos están cerca de las posiciones que dan acceso a competición europea, los pericos viven en tierra de nadie desde hace varias jornadas, pero si siguen sin sumar 3 puntos en las próximas jornadas empezarán a mirar cada vez con mas miedo los puestos de descenso.
Comenzó el partido con la tónica habitual en los dos equipos, el equipo celeste dominando y teniendo la posesión del balón y el Espanyol defendiendo de forma ordenada y esperando a robar un balón para sacar un contraataque provechoso. Y fue así en un robo cerca del centro del campo, cuando el balón llegó a Gerard Moreno en el círculo central, levantó la cabeza y vio como Leo Baptistao tiraba un desmarque. Le puso un pase medido por delante de la defensa, y Baptistao con velocidad cazó el balón y marcó el gol que ponía por delante al equipo blanquiazul.
Se veían los periquitos, en el escenario soñado, ponerse por delante en el marcador, en la primera parte, para así aguantar en defensa y aprovechar que el otro equipos apretaría para pillar otra contra. Pero el Celta no se puso nervioso, y se puso a tocar como antes del gol, parecía que el gol no había afectado a los vigueses. El centro del campo local cada vez tocaba más rápido y avanzaba metros de forma más efectiva, y a esto se le sumó las incorporaciones siempre peligrosas de Hugo Mallo, quien creó una autopista por su banda. Fue en una de las jugadas combinativas del Celta, cuando el lateral subió le llegó el balón que centró de forma muy precisa para que Maxi Gómez marcara el gol del empate para los Celtiñas.
Con el empate a un gol se fueron todos al descanso. Al volver, la segunda parte comenzó como había comenzado la primera parte, un Celta con mucho balón, pero con una circulación poco fluida por la buena defensa del Espanyol que se basaba en la buena colocación de los suyos y en mantener un orden. Pero empezó a romperse el partido, otra vez igual, por la Autopista que tenía Hugo Mallo por su banda, y tuvo que intervenir de manera heroica el portero perico Diego López, tras esta oportunidad el campo parecía inclinado hacia la portería perica. Y empezó a aparecer el talentoso jugador local, Emre Mor, y en una de sus internadas por la banda izquierda, colgó un balón que Maxi Gómez pudo controlar, darse la media vuelta y con un chut raso remontar el partido a 10 minutos para el final.
Los últimos minutos parecía que iban a ser los típicos "minutos de la basura" ya que no parecía que el Espanyol tuviera capacidad de reacción. Todo lo que no fuera una victoria Celtiña parecía una utopía, y nada más lejos de la realidad. En una jugada en la que parecía que no había peligro ya que la tenían los defensas del Espanyol, rifaron un balón arriba, que Gerard Moreno peleó, lo controló y consiguió que acabara en la red, a menos de 5 minutos del minuto 90, el Espanyol empataba de nuevo el partido. De ahí al final del partido el marcador no se movió más y se llevaron un punto para cada equipo. El Celta sigue mirando a Europa y los pericos tienen en tierra de nadie pero empiezan a mirar al descenso por el retrovisor.
Artículo hecho por Iván Galván (@ivanbetisbarna)
No hay comentarios:
Publicar un comentario