Hoy quiero escribir sobre el gran jugador tacuense. A nadie
se le escapa que Suso es el alma de este equipo, que siente los colores como
nadie y que, cuando no está en forma, el equipo lo nota demasiado.
En humilde opinión de un servidor, Suso es, sin lugar a
dudas, uno de los mejores extremos de la categoría de plata del fútbol español.
Pocos saben aguantar el balón de espaldas como él, haciendo valer su fuerza
física, como pocos son también los que atesoran su capacidad de desborde y su
velocidad. Es cierto que le falta algo de potencia en el disparo a puerta, pero
esa labor es más propia de los delanteros, y es aquí donde está el “debe” de
este equipo. La aportación de Suso se ve disminuida porque el equipo adolece de
una alarmante falta de alternativas en la delantera, una posición ocupada por
el hondureño Anthony Lozano y el canterano Alexander Mesa “Nano”.
De todos es sabido que el centroamericano apenas ha podido
disfrutar de continuidad, ya sea por lesiones, ya sea por convocatorias con la
selección de su país. Por suerte en sus innumerables incomparecencias ha estado
Nano, si bien es cierto que mirar al banquillo y no ver una sólida alternativa
de cara a una sustitución del canterano durante el partido nos revela muy a las
claras la mala planificación de la plantilla.
Suso necesita rodearse de jugadores que sepan beneficiarse
de su juego. La sociedad que creó con Ayoze Pérez (actual futbolista del
Newcastle de Rafa Benítez) durante la temporada en la que la joya de la cantera
blanquiazul despuntó nos da muchas pistas. Un delantero que sepa aguantar el
balón, dinámico, con capacidad de desmarque y que arrastre a las defensas
rivales allanando el camino en banda al jugador de Taco. Por desgracia, ninguno
de nuestros delanteros cumple al 100% con dichas características, lo que ha
llevado al bueno de Suso en muchos partidos a realizar la guerra por su cuenta
con un resultado negativo. Si a esto le unimos el bajo estado de forma que ha
padecido en los últimos meses, no es de extrañar el escaso rendimiento que ha
desplegado bajo la tutela de Martí.
Pero Suso es mucho Suso, y con la llegada de jugadores como
Moutinho o Javi Lara su juego se ha visto beneficiado. Se le ha vuelto a ver
con desborde, asumiendo casi en exclusividad el juego de ataque tinerfeñista.
Parece ser que, por fin, podremos disfrutar del Choco Lozano
(salvo lesión) y, con la gran aparición de Nano, Omar, la vuelta de Moutinho y
la calidad de Javi Lara, nada hace pensar que este equipo pueda darnos una
alegría esta temporada.
Con Suso sobre el terreno nadie se duerme. Con Suso en forma
podemos soñar.
Artículo hecho por Adal Quintero
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