domingo, 19 de noviembre de 2017

SEGUIMOS CUESTA ABAJO

Escribimos este comentario a raíz del partido en Huesca, y comenzamos recordando que antes del encuentro, varios comentaristas manifestaban su extrañeza ante el anuncio de Martí, de que “si el Tenerife no sube, se iría”. No entiendo que se sorprendan por eso, porque es lo más coherente que ha dicho el entrenador en meses. ¿Ustedes se imaginan una temporada más, instalados en el “quiero y no puedo”? Por eso pensamos que Martí está muy acertado en anunciar su marcha, (yo añadiría “me iré aunque suba de categoría”) porque el Tenerife necesita nuevos esquemas y nueva ilusión y eso lo da un nuevo entrenador, ...si es bueno, claro, y ahí tenemos a Rubí. 


Y es que el puesto de entrenador desgasta mucho, y más cuando vamos como vamos.

Los mismos comentaristas se mostraban optimistas por la presencia ante el Huesca de una delantera con la inclusión de Malbasic, Longo y Villar. Sin embargo, algunos de nosotros, los que no sabemos (y reconocemos que es así), nos preguntábamos públicamente en las redes quién iba a asistir a esa delantera, puesto que en el centro del campo no había “jugones”.

Y así fue: el Huesca, muy motivado y con un perfecto esquema de juego, jugó al fútbol, con entrega, con clase y sabiendo cada uno lo que tenía que hacer, ...y lo hicieron.

Cierto que tuvimos mala suerte con el resbalón de Sáenz y también en el tercer gol, en el que le volvieron a ganar la partida a Jorge en una tarde de infortunio para el joven defensa, pero creemos que eso no es todo, sino que Martí aún no da con la tecla. Nos explicamos:

En la defensa, el tándem Sáenz-Bruno de la pasada temporada, que se complementaba perfectamente, ya no está, y, por contra, Jorge está pasando una mala racha y Carlos Ruiz, siempre voluntarioso,  intenta cubrir demasiados espacios, y eso produce huecos por donde se nos van las ilusiones. Ahí, en la zaga, hemos bajado sensiblemente. Más aún con la lesión de Camille. 

Pero es en el centro del campo donde se nos siguen cayendo los esquemas, porque es un centro que no manda en el campo y no crea fútbol, sino que achica balones. Es un centro de marcado carácter defensivo, corto en velocidad y en visión de juego, que juega mirando hacia atrás, y que no fabrica nada, ...solo de vez en cuando, merced a alguna genialidad de Aitor Sanz, ...y todos sabemos que cuando se juega así, al límite, es difícil que los interiores y los delanteros estén en posición de desequilibrio o de recibir con garantías. Por eso, cuando marcamos algún gol es merced a alguna genialidad individual más que a labor de equipo. Y por eso, marcamos poco, ...y así nos va.

Y delante, una vez más, insistimos en que necesitamos jugones como Casadesús (o Montañés, que está lesionado), y también necesitamos que Tayron, Brian Martín y Juan Carlos se pongan las pilas para que desborden y den asistencias a los dos únicos delanteros natos que tenemos, y que no tienen por qué jugar juntos, Martí, grábatelo, ... a menos que sea en un 4-4-2 con bandas activas ...y con otro centro del campo.

Para ello necesitamos urgentemente la mejor versión de Bryan Acosta y darle descanso a algunos de los fijos, que sí, que tienen voluntad y son grandes profesionales, pero esos cuerpos ya no están para estos trotes.

Si no,  “p'alante” vamos, ...y ojalá me equivoque. 
Artículo hecho por Rafael Lorenzo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario