CRÓNICA: REAL MADRID 3-2 SEVILLA FC

ASENSIAZO, EL 93 Y GALÁCTICO AL CANTO
Ayer se celebró la final de la Supercopa de Europa entre el Real Madrid y Sevilla. El partido se decidió en un 3-2 para los merengues en un final agónico.

El Real Madrid comenzaba con un once que sorprendió al mundo entero. Un 4-3-3 con Casilla en la portería, Carvajal, Ramos, Varane y Marcelo en la defensa. Aquí venía una de las sorpresas, el centro del campo estaba compuesto por Isco, Casemiro y...Kovacic. Zidane dejó a Modric en el banquillo ya que no había disputado muchos minutos. La segunda sorpresa venía en la delantera, la delantera estaba formada por Lucas Vázquez, Morata y Marco Asensio. El canterano se hizo con el puesto de titular relegando a James a la caseta. El Sevilla por su parte empezaba con este once.Sergio Rico, Nico Pareja, Carriço, Kolo, Iborra, Kiyotake, N´Zonzi, Franco Vázquez, Mariano, Vietto y Vitolo.

El partido comenzaba lento y se veia a las 2 equipos intranquilos. Esto se veía en los múltiples fallos en los pases, sobretodo en la primera parte.

Tras un balón dividido que se encuentra el jovencísimo Marco Asensio, que realiza un control orientado y le pega desde mas de 30 metros. El balón acaba en la mismísima escuadra limpiando todas las telerañas de la portería y dejando un gol para la historia.

Tras el fantástico gol del canterano, el Real Madrid se vino abajo, y su verticalidad y su rapidez de juego, fueron disminuyendo. Tan relajado estaba el Real Madrid, que en una jugada cerca del descanso, el "mudo" Vázquez caza un balón entre la defensa de los blancos y la manda al palo largo de Kiko Casila, imparable para este.

Tras la reanudación del encuentro, parecía que estuvieramos viendo otro partido. El Real Madrid no acababa de encontrar su esencia y el Sevilla cada vez se iba engrandeciendo. Hasta que una jugada de Iborra,con dos recortes incluidos,acababa en penalti. Ramos,como no, fue el que derribó a Iborra en una jugada que suspira duda entre los aficionados. Ramos le llega a tocar, pero tal vez no tan fuerte como para derribarlo. Total, Konoplyanka sería el que transformaría el penalti.

El Sevilla había remontado un partido en el que los merengues fueron de mas a menos.

El gol de Konoplyanka despertó a los merengues y comenzó el asedio a la portería de Sergio Rico. Entraba el primer cambio de Zidane, era Benzema el que sustituía a un pésimo Morata, que no dió la talla en el partido. En la primera jugada de Benzema, ya había hecho mas que Morata en 60 minutos. Entraba el segundo cambio, esta vez era Modric, que entraba por Isco, que instantes antes había rozado el empate con una gran jugada. Se acercaba el final y Zidane sacó a James por Kovacic (que no había hecho un gran partido) a demostrar su grandeza.

Sergio Rico se vistió de héroe sacando hasta dos mano a mano de Lucas Vázquez y James. Pero no fue hasta el 93 en el que una jugada por la banda derecha, Lucas Vázquez mandaba un centro directamente a la cabeza para que el de siempre, el de la Décima, el de la Undécima y el de otras tantas finales, cabeceara sin resistencia alguna. Si señores, en el 93 otra vez, para sufrimiento de algunos, y éxtasis de otros. Volvió a mostrar su grandeza al mundo, salvando de nuevo al Madrid a falta de 1 minuto del final. Lo que Ramos te quita, Ramos te da.

Comenzaba la prórroga y 3 minutos después, Kolo era expulsado por segunda amarilla. Si lo de antes era un asedio, lo de la prórroga no tiene nombre. El Sevilla aguantaba como podía con 10 y el Real Madrid atacaba, atacaba y volvía a atacar. En el 99, un córner que acababa en el pico del área a Marcelo, este la ponía a "la olla", y Ramos,como no, marcaba gol cruzando el disparo con un excelente remate de cabeza. Pero, para sorpresa de todos, el gol fue anulado, había pitado una falta mas que dudosa. Y es que hasta después del partido, Ramos seguía quejándose de su gol anulado.

Pero no sería hasta el 119 (lo mejor se deja para el final), en el que Carvajal, desde el centro del campo, fue directo como un rayo hacia el área, para cuando se quisieron dar cuenta de su carrera, Carvajal ya estaba celebrando el gol. Merecido gol, para un canterano, que no se rindió jamás, y que luchó siempre hasta el final.

Este partido,mas de pretemporada que otra cosa, ha servido para dejar ver 3 cosas: que Zidane es un entrenador con mucha personalidad, que es mejor tirar de cantera que de cartera y que ya tenemos galáctico, su nombre es Marco Asensio.

¿Masía? Quien quiere Masía cuando se tiene La Fábrica.

Artículo hecho por Manu (@CarreraMira)