Mañana llega al Camp Nou uno de esos partidos complicados, toscos y en el que los hombres de Luis Enrique harán bien de salir con el cuchillo en los dientes desde el minuto uno, si no quieren llevarse sorpresas desagradables.
Sin margen de error tras haber perdido ya demasiados puntos
en ésta Liga, el equipo culé se ve obligado a ganar al Athletic de Bilbao, como
ya hizo en Copa, si no quiere quedarse descolgado del todo de la cabeza de la
clasificación.
Lejos de convertir el Camp Nou en una plaza inexpugnable,
han volado ya demasiados puntos del estadio barcelonista como para tomárselo a
broma y el cuadro rojiblanco no parece el rival más propicio para que eso no
vuelva a pasar.
Armado con sus mejores hombres, con los temibles Williams y
Aduritz delante, van a volver a poner a prueba a la defensa culé y también, a
su mermado centro del campo. Como ya ha anunciado Ernesto Valverde en rueda de
prensa, a su equipo le interesa un partido con movimiento y, para ello,
seguramente volverá a apostar por una presión alta, cerca de la portería de Ter
Stegen, para intentar buscar los errores de los jugadores de Luis Enrique, que
tendrán que estar muy finos en la salida del balón e intentar compensar el
esfuerzo que hicieron el pasado miércoles en Copa con su calidad y las
inevitables rotaciones.
Rotaciones en defensa donde Aleix Vidal, Mathieu y
Mascherano tienen opciones de volver a ocupar. Éste último si finalmente se
recupera Sergio Busquets, sino, ha demostrado que es su sustituto más válido y
volvería a ocupar la posición de pivote en el centro del campo. Es imposible
apostar por los interiores que van a jugar mañana debido al amplio abanico de
posibilidades con las que cuenta el técnico asturiano, pero Iniesta ha empezado
a entrenar con el grupo y mañana mismo podría recibir el alta médica, aunque
quizá sería arriesgado hacerlo jugar desde el inicio. En la delantera, con
Neymar sancionado para el partido de Copa y Messi siendo un fijo, sólo Luis
Suárez tiene posibilidades de descansar, debido a su gran despliegue físico en
los partidos, aunque con la poca confianza que hay en Paco Alcácer, también
parece poco probable.
Partido bonito e intenso, entre dos equipos que ocupan
posiciones muy avanzadas en la clasificación y que ya nos ofrecieron un buen
espectáculo en Copa. El Barça está obligado a ganar si no quiere perder más el
tren de la Liga y el Athletic quiere ganar, tras 19 pinchazos consecutivos en
el estadio barcelonista.
Artículo hecho por Meri (@Mtenas)
Artículo hecho por Meri (@Mtenas)
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