La pasada noche tuvo lugar el encuentro probablemente más esperado de la International Champions Cup en la sede de Estados Unidos, el primer clásico en partido amistoso de la historia reciente que nos dejó el primer duelo entre Valverde y Zidane que se repetirá en numerosas ocasiones esta temporada. Se enfrentaban dos equipos que seguían dos líneas totalmente distintas: por una parte, el Barcelona, que está demostrando en esta pretemporada que están cumpliendo con los mínimos que les pide Valverde (presión alta con línea adelantada tras perdida, aumento en la velocidad de circulación del balón, descaro de los jóvenes...); Y el Real Madrid, que salvo ciertas excepciones (Keylor Navas, Marco Asensio, Mateo Kovacic, Marcelo...) están demostrando que aún les queda mucho por rodar y por prepararse para llegar en buenas condiciones a la hora de jugarse los títulos.
Partiendo de que fue un partido bastante loco, un corre calles, en la primera parte los de Zidane (con el equipo prácticamente titular a falta de Kroos y Cristiano) salió completamente dormido y en apenas 7 minutos se veían 0-2 por detrás en el marcador, tras una buena jugada individual de Messi tras pase de Busquets que con fortuna y tras tocar en Varane entra en la portería blanca y con un buen disparo de Rakitic ajustado al poste izquierdo de la portería de Keylor Navas. A medida de que se iban sucediendo los minutos, los merengues empezaban a despertar, y tras una buena jugada de Mateo Kovacic y un gran disparo, conseguian reducir distancias en el marcador. Los blancos seguian mejorando y equiparandose al conjunto blaugrana y tras una gran conducción de Marco Asensio por el centro y tras una gran devolución de Mateo Kovacic, este conseguía batir por el palo corto a Cillessen para poner las tablas con las que se llegaría al descanso en el marcador.
En la segunda parte el partido siguió en la misma tónica, un barsa muy claro en sus ideas y un Real Madrid con numerosas dudas en defensa que solo lograba tapar Keylor Navas con sus paradas. Se realizaron numerosos cambios en los dos equipos durante el descanso y el minuto 65, donde entraron tanto los nuevos fichajes como las jóvenes promesas de ambos equipos. El definitivo 2-3 en el marcador favorable al Barcelona llegó tras una falta botada por Neymar en la frontal del área (quien sabe si en su último partido) para que Piqué tras un grave error de los jóvenes del Madrid en la marca, batiera con comodidad a Keylor Navas, que nunca pudo hacer nada. Finalmente y con la entrada de Isco en el terreno de juego, llegaron las mejores jugadas de los de Zidane, que con dos jugadas individuales del malagueño estuvieron a punto de igualar el marcador si no llega a ser por las dos grandes intervenciones del portero que por ahora parece titular del Barcelona, Cillessen.
Todo parece apuntar a que si el Madrid quiere hacerse con los dos primeros títulos de la temporada tendrá que mejorar mucho en esta semana y media que les queda de pretemporada ya que no podrán contar con Cristiano ya que no viene de hacer la pretemporada con el resto de sus compañeros. Mientras tanto, en Camp Barça disfrutan de ver a su equipo ganar esta competición de verano y estando tranquilos de que lo que todo parece apuntar a un buen inicio de campaña de los de Valverde.
Artículo hecho por Diego Heras (@diegoheras98)
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