El Arsenal solo fue capaz de marcarle un tanto a De Gea a pesar de disponer de hasta 33 ocasiones para poder batirle.
Arsenal y Manchester United, Wenger y Mourinho, dos estilos de juego diferentes se veían ayer las caras en el Emirates, a pesar de que ambos equipos saliesen con la misma formación. El United buscaba seguir la estela del City a la espera de que este pinche, y el Arsenal quería ganar ante un rival de su misma talla y colocarse en puestos de Champions tras la victoria del Liverpool.
Ni cinco minutos tardó el United en ponerse por delante, gracias a un gol de Valencia, aprovechando un error en la salida de Koscienly, provocado por una presión alta muy intensa. A Mourinho no le podía salir mejor el planteamiento, pues simplemente tenía que esperar encerrado en su campo y aprovechar una contra o una pérdida de balón en campo del Arsenal, y dicho y hecho. Seis minutos más tarde, otro error en la salida de balón, esta vez de Mustafi, hizo que entre Martial y Lindgard combinasen para que el segundo pusiese el 0-2.
Tras el error Mutafi tuvo que retirarse lesionado, dando entrada Wenger a Iwobi y cambiando por lo tanto el esquema, cambiando esto el partido. Tras el 0-2, el Arsenal se hizo con el dominio absoluto del balón, generando cada vez más y más peligro a David De Gea, que estuvo espectacular durante toda la tarde. Lacazette dispuso de las ocasiones más claras, siendo una de ellas un penalti claro que no pitó el colegiado. A pesar de todas las claras ocasiones, el partido se iba con el mismo resultado al descanso.
Cuando mejor estaba el Arsenal, mazazo del United
El comienzo de la segunda parte no varió en nada de lo que estábamos viendo antes de irnos al descanso. Los Gunners seguían dominando y atacando, ante un United incapaz de salir ni siquiera de su propia área, por eso no tardó en llegar el 1-2. Excelente pase de Alexis a la espalada de la defensa de los Devils, que recibe Ramsey y deja muerto el balón para que Lacazatte fusile a De Gea. Teníamos partido en el Emirates.
El Arsenal seguía intentándolo, disponiendo de otra clarísima ocasión, esta vez de doble, de Alexis y Lacazette, pero De Gea volvía a salvar a los suyos. El empate era cuestión de tiempo, incluso se llegaba a pensar que si alguien iba a ganar ese partido era el Arsenal. Pero nada más lejos de la realidad, a este equipo se le resisten los grandes. Una contra del United conducida por Pogba, que llegaba hasta línea de fondo, donde después de librarse de una otra vez desacertado Koscienly, ponía un gol en bandeja a Lindgard. El United volvía a noquear al Arsenal.
A pesar del jarro de agua fría que acababan de recibir los locales, estos seguían intentando volver a meterse en el partido, pero De Gea no iba a permitir eso. En el minuto 75, Pogba realizó una durísima entrada sobre Bellerín, lo que le costó la roja directa, y no solo perderse lo que quedaba de partido, sino también el partido más importante de la temporada, el derbi contra su máximo rival en la Premier.
Con un jugador más, el Arsenal podía tener alguna opción de recortar distancias, pero lo cierto es que desde ese momento, los Gunners no crearon muchas más ocasones, y el United se encontraba muy cómodo defendiendo el resultado. El cansancio mental y físico de los locales no se notaba en los últimos minutos.
Importante victoria la que consiguen los de Mourinho, para seguir al acecho del City. Injusta y dolorosa derrota para los de Wenger, que a pesar de mostrar una de las mejores imágenes de lo que llevamos de temporada, no consiguen ganar los duelos contra los rivales directos.
Artículo hecho por Miguel Pérez (@miguelinpl)
Arsenal y Manchester United, Wenger y Mourinho, dos estilos de juego diferentes se veían ayer las caras en el Emirates, a pesar de que ambos equipos saliesen con la misma formación. El United buscaba seguir la estela del City a la espera de que este pinche, y el Arsenal quería ganar ante un rival de su misma talla y colocarse en puestos de Champions tras la victoria del Liverpool.
Ni cinco minutos tardó el United en ponerse por delante, gracias a un gol de Valencia, aprovechando un error en la salida de Koscienly, provocado por una presión alta muy intensa. A Mourinho no le podía salir mejor el planteamiento, pues simplemente tenía que esperar encerrado en su campo y aprovechar una contra o una pérdida de balón en campo del Arsenal, y dicho y hecho. Seis minutos más tarde, otro error en la salida de balón, esta vez de Mustafi, hizo que entre Martial y Lindgard combinasen para que el segundo pusiese el 0-2.
Tras el error Mutafi tuvo que retirarse lesionado, dando entrada Wenger a Iwobi y cambiando por lo tanto el esquema, cambiando esto el partido. Tras el 0-2, el Arsenal se hizo con el dominio absoluto del balón, generando cada vez más y más peligro a David De Gea, que estuvo espectacular durante toda la tarde. Lacazette dispuso de las ocasiones más claras, siendo una de ellas un penalti claro que no pitó el colegiado. A pesar de todas las claras ocasiones, el partido se iba con el mismo resultado al descanso.
Cuando mejor estaba el Arsenal, mazazo del United
El comienzo de la segunda parte no varió en nada de lo que estábamos viendo antes de irnos al descanso. Los Gunners seguían dominando y atacando, ante un United incapaz de salir ni siquiera de su propia área, por eso no tardó en llegar el 1-2. Excelente pase de Alexis a la espalada de la defensa de los Devils, que recibe Ramsey y deja muerto el balón para que Lacazatte fusile a De Gea. Teníamos partido en el Emirates.
El Arsenal seguía intentándolo, disponiendo de otra clarísima ocasión, esta vez de doble, de Alexis y Lacazette, pero De Gea volvía a salvar a los suyos. El empate era cuestión de tiempo, incluso se llegaba a pensar que si alguien iba a ganar ese partido era el Arsenal. Pero nada más lejos de la realidad, a este equipo se le resisten los grandes. Una contra del United conducida por Pogba, que llegaba hasta línea de fondo, donde después de librarse de una otra vez desacertado Koscienly, ponía un gol en bandeja a Lindgard. El United volvía a noquear al Arsenal.
A pesar del jarro de agua fría que acababan de recibir los locales, estos seguían intentando volver a meterse en el partido, pero De Gea no iba a permitir eso. En el minuto 75, Pogba realizó una durísima entrada sobre Bellerín, lo que le costó la roja directa, y no solo perderse lo que quedaba de partido, sino también el partido más importante de la temporada, el derbi contra su máximo rival en la Premier.
Con un jugador más, el Arsenal podía tener alguna opción de recortar distancias, pero lo cierto es que desde ese momento, los Gunners no crearon muchas más ocasones, y el United se encontraba muy cómodo defendiendo el resultado. El cansancio mental y físico de los locales no se notaba en los últimos minutos.
Importante victoria la que consiguen los de Mourinho, para seguir al acecho del City. Injusta y dolorosa derrota para los de Wenger, que a pesar de mostrar una de las mejores imágenes de lo que llevamos de temporada, no consiguen ganar los duelos contra los rivales directos.
Artículo hecho por Miguel Pérez (@miguelinpl)
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