COMO UNA GASEOSA ABIERTA
Por segundo año consecutivo el Real Oviedo ha dejado escapar el objetivo del playoff en un mal final de liga, si bien la anterior temporada la causa fue la mala gestión de una situación extradeportivos, en esta temporada el Real Oviedo peleó hasta el final con el mismo entrenador, pero la mala temporada a domicilio y unos planteamientos poco atrevidos, dieron al traste con las ilusiones del Oviedismo.
La temporada comenzaba con fichajes ya hechos antes que se anunciase el entrenador, en Oviedo se esperaba un técnico con experiencia y el club sorprendía con el nombre de Fernando Hierro, persona a la que sobra presentar en el mundo futbolístico. La noticia corrió como la pólvora y con ello se logró que se hablase en el planeta deportivo del Real Oviedo en unos dias más de lo que se habla de muchos equipos de primera en todo el año, impacto mundial conseguido.
Pero no por ello se iba a conseguir un impacto deportivo, el fichaje mediático sería Miguel Perez Cuesta "Michu", Oviedista que se hizo grande en el Swansea, pero que una lesión de tobillo le martiriza y le impide dar el 100% en el fútbol profesional. El media punta canterano debía ser algo que enganchase, por si no lo estamos ya, al aficionado azul para renovar carnets en masa. Y con una presentación que recordaba a la de Esteban en 2014, se demostraba que tanto Michu como el Oviedismo estaba con ganas.
Sin embargo el equipo comenzó duditativo, con una inmerecida derrota en Pucela y con la eliminación en primera ronda de Copa ante el UCAM. Hubo que esperar al partido de la jornada 7 en Cadiz, en plenas fiestas de San Mateo y en un escenario de grandes recuerdos para el Oviedismo, el equipo afrontó el partido tras una derrota en casa ante el Reus en penúltimo lugar, y el Carranza encauzó la casa azul con una victoria 0-2 que sirvio de espoleta para los de la capital Asturiana.
Poco a poco, y a pesar de la losa de los partidos de fuera el equipo lograba ponerse en la zona alta hasta lograr ponerse en puesto de ascenso directo tras empatar en casa contra el Lugo con un postrero y merecido gol de Hector Verdés.
Pero a partir de ahí se sucedieron unos partidos delirantes a domicilio, Huesca, Alcorcon, Sevilla Atco... Partidos en que, por unas cosas o por otras, el equipo no era capaz a tener un partido normal, una decisión arbitral que marcaba el partido, errores de Juan Carlos de bulto, o planteamientos desde el banquillo sin alma que hacia que equipos que ponían todo el interés, embotellasen al Oviedo y sólo le dejaran en 50 metros de terreno de juego.
El equipo se mantuvo arriba por la imagen que daba en casa, serio y efectivo, terminando por ganar en el Tartiere a 6 de los 7 equipos que se clasificaron por encima del Oviedo en la tabla, y además hacerlo con solvencia.
El equipo mejoró algo la imagen fuera de casa, se ganó en Anduva y se empataba merecidamente ante el difícil Reus, pero llegaban partidos como Tenerife, donde una delirante actuación arbitral dejaba sin un justo premio para el Oviedo, o Levante donde se tuvo el día tonto de no materializar cualquier cosa que hagas, pero no todo fue achacable al trencilla o a la falta de acierto, Lugo o Tarragona por ejemplo fueron escenarios donde el equipo se deja puntos por planteamientos ultradefensivos, muchos fueron los partidos que ganamos apuradamente partidos que iban tranquilos, pero en el camino se quedaron puntos que no se debieron perder.
El equipo terminaba la temporada con 2 victorias, pero hablándose mucho más de otras cosas como la mala imagen dada por el capitán Erice en pleno centro de Oviedo, con una afición enfadada que la tomo con el de forma principal, y con un último partido en Elche en el que parecía un amistoso en lugar de un partido en el que debíamos explotar una pequeña oportunidad de playoff.
Este verano debe de suponer inflexión para el Real Oviedo, preparamos una temporada en la que se recuperará el derby Asturiano, si, le pese a quien le pese y a pesar de tratar de borrarnos del mapa, 14 años después nos volvemos a encontrarnos con nuestro máximo rival. La temporada tiene muchos alicientes, pero ninguno más grande que el volver a pelear por todo, y esperemos que desde el club así se entienda, sigamos avanzando como entidad y aprendamos de los tropiezos.
Valoración individual de la temporada:
Juan Carlos: El portero titular. Partidos horribles, pero dio mas de lo que perdió. Un 6.
Esteban: Sólo jugó el partido de Copa. Injusto no poder disfrutar otra vez del Tartiere.
Johanneson: Le costo hacerse hueco. Ataca y baja, pero se le tiene que exigir contundencia atrás y tiro... Por que no adelantarlo un poco?
Nota: 6
Christian: Valentía, carrera... Útil para la temporada que viene.
Nota: 6
David Fernández: No fue su mejor temporada.
Nota: 4
David Costas: Llega en Enero y se hace con el puesto. Hay que intentar convencer al Celta para retenerle otra temporada. 3 goles.
Nota: 9
Hector Verdés: Importancia en el primer tramo, irrelevancia final. Más contenido que el año anterior, Lanzarote no piensa lo mismo.
Nota: 4
Oscar Gil: Errores imperdonables, poco aportó.
Nota: 2
Peña: Acertamos los 2, el se fue al Geta y nosotros nos quitamos un jugador que si centrase bien habría jugado muchos años en primera.
Nota: 3
Varela: Lesionado de gravedad en Lugo. Buen golpeo a balón parado.
Nota: 5
Lucas Torró: Bien jugador para el medio campo, titular indiscutible. Volverá al Real Madrid, pero hay que ver que ocurre con el.
Nota: 6
Erice: Su imagen en los últimos días no es la adecuada de un capitán del equipo. Futbolísticamente el equipo mejoró cuando no se acerca a los centrales.
Nota: 2
Hector Nespral: Una buena noticia del verano, Hectorin a la primera plantilla, pero Hierro se ocupó que desperdiciaran tanto el primer equipo como el Vetusta a este jugador, 10 minutos en Elche fue lo que jugó.
Alaniz: Ya no nos acordamos de el, poco utilizado y fuera de aquí en diciembre.
Ortiz: Apuesta personal de Hierro y sólo jugó 3 partidos. Ni a cederlo fuimos capaces.
Jonathan Vila: El Vigues no mereció tanto ostracismo. Gracias (como a otros jugadores) por venir y sacarnos del barro, parece que no volverá.
Susaeta: Sin tanto gol como la pasada temporada, pero el máximo asistente de la liga. Por mi se quedaría aquí.
Nota: 6
Saul Berjon: El revulsivo del mercado de invierno no fue tal. Vino de México fuera de forma y trabajando con el desde el minuto 0 y con un técnico con genio, puede ser muy sprovechable esta temporada.
Nota: 3
Carlitos: Ya nadie se acordaba de el hasta que a falta de 5 partidos entra en los choques aportando movilidad y ganas, con eso suficiente para dar más que Saul.
Nota: 5
Rocha: Nada de nada. Decepción.
Nota: 3
Nando: Buen inicio y buen final. Hay que seguirle en el Valencia a ver donde puede llegar.
Nota: 6
Jonathan Pereira: De más a nada. El jugador más bajo de segunda peleando balones aéreos.
Nota: 4.
Linares: Tendrá más o menos acierto, pero siempre está ahí, Curra, presiona y se desmarca con sentido. Por momentos estuvo fuera de la rotación.
Nota: 5
Toché: Buen número de goles para el de Sangonera. Gran jugador de área que fue víctima de planteamientos técnicos ultraconservadores que le obligaban a ser sólo el primer defensa, aún así, una buena temporada.
Nota: 7
Fernando Hierro: Su primera experiencia como jefe del banquillo ha sido un experimento que no ha salido del todo bien. Manejo un buen equipo y esperamos que se note su experiencia en el Requexon, hubo que echar mano del Chato segura tras la espantada de Xavi Valero como entrenador de porteros, pero no hay que esconder que la imagen dada a domicilio por el Real Oviedo no es la óptima de un equipo que quiera subir otro peldaño. El fútbol es para valientes, y solo 4 victorias de 21 partidos a domicilio, no son números ganadores.
El Oviedismo espera ya nombres, decisiones y un proyecto con orgullo, valor y garra.
Artículo hecho por Pedro Solis (@ovdsobrebocina)
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