El Nàstic perdió contra el Oviedo por 1-2 en un partido que se decidió en los últimos minutos con un penalti que transformó Aarón Ñíguez.
El conjunto catalán se adelantó en la primera parte con un gol de penalti también, anotado por Barreiro. Pero el Oviedo remontó en la segunda parte.
Carlos Hernández y Aarón dieron los tres puntos al conjunto asturiano, que acabaron con uno menos por doble amarilla del goleador Carlos Hernández.
En la primera parte ambos equipos tuvieron sus oportunidades, con un penalti para cada uno y polémica.
En la primera media hora del partido no hubo acierto de cara a portería. La oportunidad más clara la tuvo Saúl Berjón, que envió a las nubes un penalti.
La polémica llegó con la no expulsión de Carlos Hernández, que derribó a Barreiro cuando encaraba portería. El central, que ya habia sido amonestado, no vio la segunda amarilla.
Minutos después, Mossa haría un discutido penalti a Ike Uche, que Manu Barreiro anotó.
Durante la segunda parte el Nàstic se echaría para atrás y el Real Oviedo empezaría a dominar el partido, teniendo ocasiones pero sin acertar, en parte debido al portero Dimitrievski.
Los cambios defensivos no beneficiarion al Nàstic. Uche pudo hacer el segundo gol para aumentar el resultado, pero al final el que anotó fue el conjunto ovetense. Carlos Hernández, sin oposición en el area pequeña, cabeceó al fondo de la red un centro desde la izquierda.
En el añadido, un discutible penalti de Suzuki a Mossa acabó dando el triunfo a los asturianos. Aarón Ñíguez no perdonó e hizo el 1-2 definitivo.
Artículo hecho por David García (@davidgsalvans)
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