jueves, 1 de febrero de 2018

MERCADO TRANQUILO, AL FIN

EL REAL ZARAGOZA DESPUÉS DE MUCHO TIEMPO HA TENIDO UN MERCADO INVERNAL SIN REVOLUCIONES

Hacía mucho tiempo que los aficionados maños no tenían un mercado de invierno en el que veían cómo su equipo no se parecía en nada al que iniciaba la liga. Los resultados deportivos junto a la inexistencia de un proyecto hacían que fuera un de los equipos con movimientos invernales.

Este año sí que existe un proyecto deportivo que podrá gustar más o menos pero lo que no han terminado de convencer han sido los resultados deportivos conseguidos. Es verdad que con estos dos últimos partidos ganados en La Romareda han calmado un poco los aires y se mira con un cierto optimismo. 
El director deportivo, Lalo Arantegui, lo tenía claro. Si no había salidas no iba a haber entradas de jugadores. El límite salarial impuesto por La liga no daba para más. Pero, de repente, empezó a sonar con fuerza el nombre del extremo del filial barcelonista Jesús Alfaro. Venía para suplir la baja del lesionado Toquero. Además, ya pudo disfrutar de sus primeros minutos en su nueva casa contra el Córdoba. 

Jesús, quien fue pieza clave en el ascenso del filial a la categoría de plata, era pretendido por varios equipos de segunda división b pero en cuanto apareció la opción del Real Zaragoza no le costó decidir su nuevo destino. El joven extremo de 26 años no ha tenido la confianza del entrenador en esta temporada y solamente llegó a participar en seis partidos sin conseguir marcar un gol.

En el último día del mercado, cuando más movimiento suele haber, se ha producido un cambio de cromos. El defensa zaragocista Jesús Valentín se ha marchado un año después de llegar a la capital sin destacar ni hacer ruido. En esta temporada prácticamente no ha jugado prácticamente partidos donde ha sido el cuarto central del equipo por detrás de Mikel, Grippo y Verdasca. 

Ante la salida de este jugador, se ha producido la llegada de otro central Bruno Perone. Ya fue pretendido en verano por Lalo pero su antiguo equipo, el Nàstic, se remitió a su cláusula de rescisión. Seis meses después, el director deportivos del Real Zaragoza ya tiene al central que deseaba.

Ambos jugadores han firmado contrato hasta 2020. El rendimiento que pueden dar ambos en este equipo es una incógnita. El tiempo pondrá a cada uno en su lugar.

Artículo hecho por Eduardo Melús (@edu_melus)

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